La maloclusión o conocida comúnmente como desalineación dental, es un problema que afecta a muchas personas sin distinción de edad. Ocurre cuando los dientes no tienen su posición correcta en la mandíbula. Es así como se presentan apiñamientos, separaciones, rotaciones o mordida incorrecta.
Los factores que ocasionan la desalineación dental son diversos. En general ocurre por dos causas, la genética o situaciones y/o hábitos externos adquiridos. Las consecuencias pueden ser desde estéticas y de higiene hasta problemas para masticar, hablar e incluso respiratorios o de salud mental, según la severidad del caso.
Causas de la maloclusión o desalineación dental
Los factores hereditarios y genéticos son la causa más común del problema. Las personas que nacen con una mandíbula o maxilar muy pequeño en comparación con el tamaño de los dientes, sufrirán de apiñamiento o separación dental.
Los problemas de crecimiento óseo son otro detonante. Un desarrollo desequilibrado de la mandíbula o el maxilar puede contribuir a la maloclusión.
Perder los dientes antes de tiempo podrían provocar una desalineación. La pérdida de una pieza dental permanente sin un manejo adecuado del espacio, es muy probable que cause que los dientes adyacentes se muevan y desvíen su posición.
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Enfermedades y malos hábitos
Padecer de una enfermedad periodontal puede traer graves consecuencias. En los adultos, cuando las encías se inflaman y se pierde hueso es muy posible que los dientes se muevan y se desalineen.
Otra de las causas más comunes es tener hábitos infantiles nocivos. El uso prolongado de chupetes o biberones después de los 3 años, chuparse el dedo, la respiración bucal o presionar los dientes con la lengua pueden afectar el desarrollo de los huesos maxilares.
Un mal frecuente en la población es el bruxismo. Esta patología consiste en apretar o rechinar los dientes de forma involuntaria, comúnmente al dormir. Cuando ocurre de manera crónica un desgaste irregular de los dientes y cambios en la mordida.
Los traumatismos y lesiones bucales son causales. Un golpe o accidente en la boca o la mandíbula puede desalinear los dientes y la mordida.
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Consecuencias
La maloclusión no solo afecta la estética, sino que puede tener implicaciones significativas para la salud general. Esta ocasiona, por ejemplo, problemas de higiene bucal. Los dientes apiñados son más difíciles de limpiar, lo que aumenta el riesgo de acumulación de placa, caries y enfermedades de las encías.
Una mordida incorrecta puede causar un desgaste irregular y prematuro del esmalte dental e incluso fracturas debido a puntos de contacto fuertes. Por otro lado, también, dificulta la masticación y, por ende, la digestión.
Una posición incorrecta de los maxilares y dientes a veces afecta la pronunciación y, en casos severos, causar problemas respiratorios o apnea del sueño. Igualmente, es posible que se presente tensión muscular, dolor en la mandíbula, dolores de cabeza y molestias en la articulación.
Soluciones
El tratamiento depende de la gravedad del problema y debe ser evaluado por un ortodoncista. A menudo, se soluciona con ortodoncia fija (brackets). Otra alternativa son los alineadores transparentes, que son dispositivos removibles y personalizados, como Invisalign. En la Clínica Dental Marien Morata, en Valencia, ofrecen estos tratamientos y la atención de un equipo odontológico multidisciplinar, con solo agendar cita.
