La temporada navideña llegó y con ella las ocasiones para celebrar con familiares, amigos y compañeros de trabajo. Las fiestas y reuniones son parte del mes de diciembre y así como traen alegrías, podrían llevarnos a sufrir ciertos problemas de salud si se cae en excesos. La dentadura, y la boca en general, se halla entre las áreas vulnerables.
Es importante evitar padecer problemas dentales durante las fiestas navideñas. Para ello es fundamental mantener una estricta rutina de higiene bucal y moderar el consumo de alimentos y bebidas perjudiciales. Aquí ofrecemos algunas recomendaciones:
Consejos básicos para proteger los dientes
Mantener una higiene oral rigurosa. Durante la temporada es importante no olvidar cepillar los dientes al menos dos veces al día. Se recomienda hacerlo con una pasta dental con flúor durante al menos dos minutos cada vez. No hay que olvidar el uso del hilo dental a diario para eliminar la placa y los restos de comida entre los dientes y zonas de difícil acceso para el cepillo.
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Hidratación constante con agua. Es aconsejable beber agua frecuentemente durante y después de las comidas. Hidratarse ayuda a eliminar los restos de alimentos y a neutralizar los ácidos que dañan el esmalte dental. También, hay que limitar las bebidas azucaradas, carbonatadas y el alcohol, que contienen altos niveles de azúcar y acidez.
La prevención es clave
Visitar al dentista. Es prioridad que se considere programar una revisión y limpieza profesional antes de las celebraciones. Una evaluación dental puede prevenir problemas o identificarlos a tiempo. Si se está en Valencia, una gran alternativa es pedir una cita en la Clínica Dental Marien Morata Roig. El centro especializado en odontología estética cuenta con un equipo multidisciplinar que valora la prevención y la atención integral del paciente.
¡Cuidado con las comidas y bebidas!
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Moderar el consumo de dulces. Los postres navideños son deliciosos, pero un consumo excesivo puede ser terrible para los dientes. Los turrones, mazapanes y polvorones son altos en azúcar y muy pegajosos, lo que aumenta el riesgo de caries. Se aconseja consumirlos con moderación y, si es posible, hacerlo solo durante las comidas principales, ya que la producción de saliva ayuda a neutralizar los ácidos.
Alejarse de los alimentos duros. Es vital que se evite usar los dientes para romper cáscaras de mariscos o frutos secos (como nueces), o para abrir paquetes y botellas. Estas acciones son muy perjudiciales ya que pueden causar fracturas dentales o dañar empastes y prótesis. Siempre hay que emplear los utensilios adecuados.
Restringir las bebidas ácidas y azucaradas. No se debe exceder el consumo de bebidas carbonatadas (refrescos), zumos de frutas ácidos, vino (tinto y blanco), café y té. Estos productos contienen altos niveles de azúcar y ácidos que erosionan el esmalte dental y manchan los dientes.
